Con un terrible dolor de muelas Ubloa llega al Bosque de los Dentarios, donde topa con una niña de dientes relucientes llamada Hinca, quien la invita a su casa mientras va a buscar al Gran Dentellón, quien lo sabe todo sobre los dientes.

El Gran Dentellón le enseña a Ubloa que debe lavarse bien los dientes si no quiere acabar desdentada, como muchas personas distraídas que han dejado que los Guerreros Invisibles destruyan sus dientes en busca de restos de comida.

Finalmente Ubloa aprende la importancia de usar a diario el Cepillo Pelillo y la Pasta Mordiscona para eliminar los restos de comida y evitar el ataque de los malvados Guerreros Invisibles.